Los 5 mandamientos de los inversores sin experiencia

Resulta cuanto menos doloroso ver una caida y permanecer impasivo. Hemos cometidos grandes errores y lo peor es que en la mayoría de las ocasiones ya veniamos avisados.

El artículo los cinco errores de inversores sin experiencia debería convertirse en los 5 mandamientos del novato:

1. Lanzarse a la piscina: Muchas veces los impulsos y las ansias por ganar algún dinerillo en los mercados nos conducen a operar demasiado pronto sin conocer el proceso. ¿Que será eso del apalancamiento? Empiezas a perder dinero y ni siquiera eres capaz de descubrir el porqué. 
•  Solución: Abrir algún libro y consultar a otras personas es fundamental para no caer en estos errores.
2. Esperarse a que una negociación salga bien: si la operación se tuerce y el mercado se dirige en sentido opuesto al nuestro nos asaltarán las dudas y el nerviosismo. ¿Que ocurrirá? En el mejor de los casos se volverá a girar y nos dará la razón, cosa que siempre es buena. Sin embargo, pensar que esto sucederá siempre es un gran error. Somos nuestro propio enemigo al ser tan positivos.
• Solución: Empezar barajando el peor escenario y planificar la operación desde ese punto. Emplear indicadores suele ser de gran ayuda.
3. No colocar ordenes de pérdidas limitadas: El punto más importante. En primer lugar porque hay que definir el punto de salida y si eso sucede puede que no tengamos acceso a una mesa de operaciones o simplemente no somos conscientes de ello y acabamos perdiendo mucho más de lo que teníamos pensado. En segundo lugar porque somos humanos y podemos caer en la tentación de pensar que la situación mejorará y volveremos a zona de ganancia.
• Solución: Hoy por hoy el 90% de los intermediarios tienen la opción de colocar stops de seguridad que limitarán las perdidas. Se pueden habilitar en el mismo momento que entramos al mercado. Aprovechar esta herramienta es fundamental si se quiere seguir operando a largo plazo.
4. Buenas Rachas: Cuando hemos ganado en varias operaciones seguidas creemos que podemos conquistar cualquier reto. El exceso de confianza es un gran defecto en los operadores ya que acaba por aumentar el riesgo en las nuevas operaciones. Abusar del apalancamiento o sumergirse en operaciones con ratio riesgo- rentabilidad alto son los típicos síntomas.  
• Solución: Ser humildes. Hay que valorar cada operación individualmente independientemente de las anteriores.
5. Dar con los máximos y los mínimos: La operación perfecta es comprar en un mínimo y vender en un máximo. Sólo existen 2 tipos de inversores con capacidad para realizar estas operaciones; por un lado los grandes fondos de inversión que pueden moldear el mercado a su antojo y por otro los mentirosos. Esta actitud conlleva ser fiel a la teoría de la opinión contraria, cosa que a veces ofrece grandes recompensas, pero conlleva mucho esfuerzo. Es como llevar un paraguas los días de sol. Puede salirte bien pero en la mayoría de ocasiones es mejor seguir la tendencia.
• Solución: Buscar la tendencia y seguirla. El dinero se hace siguiendo las modas. Lo importante es no llegar el último para poder disfrutar de la ropa de temporada. :-)

La planificación es fundamental para gestionar nuestras inversiones de manera inteligente. Existen muchos métodos que nos ayudan en esta tarea. De otra forma, se acaba siendo parte de los inversores que pierden sus ahorros como si de apuestas se tratasen.

Es aconsejable conocer nuestra psicología y saber hasta donde podemos y queremos llegar. Una imagen vale más que mil palabras y la curva del sentimiento del inversor explica muy bien este punto.

Cuando entramos al mercado el gusanillo empieza a dar vueltas en nuestro interior y nuestra mente empieza a aplaudir de la emoción "que bien lo he hecho"...."he entrado perfecto"..."mira como sube" y las emociones van in crescendo...."me estoy forrando"..."debería dejar el trabajo y dedicarme a esto"....pero la euforia no dura eternamente ya que en muchas ocasiones el mercado se gira y miramos estúpidos al gráfico. "¿que esta pasando?". El activo empieza a perder valor y progresivamente va decreciendo el precio. En nuestro fuero interno se oye "Volverá a subir, volverá a subir" y a medida que sigue bajando se empieza a pensar "debería haber cerrado la posición antes, ahora es tarde" hasta que abandonamos la zona de ganancias y entramos en pérdidas. "ya no tiene sentido vender, esperaré a que se recupere" y la conversación interna sigue evolucionando mientras nuestros sentimientos negativos se acumulan. En este punto límite muchos optan por cerrar la posición y en ocasiones ven como el precio se recupera. Han aprendido una gran lección. 

Dejar correr las ganancias es casi tan estúpido como no limitar las pérdidas. Forme parte de la tendencia hasta que la moda se acabe. De esta forma volverá a tener la oportunidad de ver nuevos movimientos en el mercado y seguir haciendo dinero.